Peñarol participó en el encuentro internacional sobre migración y desarrollo
Alejandro González, consejero del Club Atlético Peñarol, formó parte de la instancia donde se analizaron los avances y desafíos de la migración como motor de resiliencia, crecimiento y oportunidades para las comunidades.
El Club Atlético Peñarol participó del encuentro internacional sobre migración y desarrollo organizado por la OIM y contó con la participación del consejero Alejandro González.
Durante el encuentro se subrayó que la migración impulsó el crecimiento económico, fortaleció comunidades y contribuyó a la resiliencia tanto en países de origen como de tránsito y destino.
Se resaltó que las remesas internacionales hacia países de ingresos bajos y medios alcanzaron en 2024 un récord estimado de USD 685 mil millones, convirtiéndose en un sustento fundamental para millones de familias y representando un componente clave del PBI en numerosos países. También se recordó que las contribuciones de las personas migrantes -en el fortalecimiento de habilidades, la cobertura de escasez de mano de obra y la dinamización de sectores como la innovación, los emprendimientos, las artes y las ciencias- están ampliamente documentadas.
Asimismo, se destacó que este vínculo entre migración y desarrollo ya había sido reconocido en la Agenda 2030, en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y en el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular (GCM), cuyo próximo examen global se realizará en 2026. Esta visión fue reafirmada en instancias recientes como la Declaración Política de la Cumbre de los ODS 2023, el Pacto para el Futuro y el Compromiso de Sevilla, que subrayó las oportunidades económicas relacionadas con la migración.
Sin embargo, también se señaló que, aunque muchas personas migran por elección, otras lo hacen por necesidad. Se advirtió que los beneficios de la migración no están garantizados y que existen desafíos tanto para los migrantes como para los Estados. Factores como brechas de desarrollo, desempleo, desigualdades y otros impulsores de la movilidad continúan influyendo en las decisiones de migración. A pesar de que la proporción de migrantes dentro de la población mundial se ha mantenido estable, el número total de personas en movimiento alcanzó niveles históricos. Paralelamente, y frente a una demanda creciente de movilidad por razones demográficas y laborales, las vías de migración regular se han ido reduciendo, generando oportunidades perdidas para sociedades y economías.
En este contexto, los participantes coincidieron en que preservar una migración bien gobernada es fundamental, considerándola un activo estratégico global para enfrentar los desafíos actuales y futuros. Se destacó la necesidad de ampliar soluciones eficaces y reformar, cuando sea necesario, los sistemas de gobernanza migratoria para asegurar que las vías de movilidad sigan siendo accesibles, inclusivas, basadas en evidencia y centradas en las personas.
También se subrayó la importancia del retorno seguro, voluntario y acompañado como parte integral de la movilidad internacional, capaz de generar beneficios en ingresos, educación, salud y empleo tanto para las personas retornadas como para sus comunidades.
Finalmente, se concluyó que los avances dependerán de una mayor cooperación internacional, diálogos contextualizados y voluntad política, así como de la capacidad de adoptar nuevas alianzas, innovación y tecnologías.














